Esta Pagina dejara de Actualizarse en Marzo 2020

Esta Pagina dejara de Actualizarse en Marzo 2020

lunes, 16 de abril de 2012

Nuevos datos sobre la zona campal de la Batalla de las Navas de Tolosa

Aparecen en el libro 'Batalla de las Navas de Tolosa, 800 años después', de Nicolás Callejas
El autor del libro, Nicolás Callejas
«El choque debió ser terrible y así lo testifica la gran cantidad de objetos bélicos que allí quedaron: trozos de espadas, lanzas, restos de escudos, botones, lorigas, cotas de malla, puñales, miles de flechas de lanzas. Hoy no sólo quedan vestigios que nos indican con exactitud el lugar de la batalla, también están las amapolas, que constituyen una muestra de la sangre derramada».
Con esta metáfora, el investigador histórico natural de Vilches aunque afincado en Santa Elena, Nicolás Callejas Sánchez, abre su hipótesis referida al lugar de la contienda en el libro que acaba de publicar: 'Batalla de las Navas de Tolosa, ochocientos años después'. Es la obra con la que este experto en el campo de la investigación histórica, militar de carrera que trabajó al servicio de S.M. el Rey, Mayordomo de la Orden de los Ballesteros de la Vera Cruz, redactor gráfico de la Unión de Periodistas y presidente de la Comisión del VIII Centenario de la Batalla en la localidad de Santa Elena, contribuye a los actos conmemorativos de la gran refriega bélica acontecida en 1212.
Cambio histórico
En su libro, Calleja profundiza en aspectos oscuros de la contienda que cambió el rumbo de la historia de España en la Edad Media. A lo largo de 79 páginas y 125 fotos a color, aporta datos hasta ahora desconocidos sobre la cruzada importantísima que los árabes llamaron Al-ikab, que dejó abierta a la reconquista las puertas del valle del Guadalquivir y acabó siendo la antesala que arrebató al Islam la mayor parte de Al Andalus.
El investigador describe el conflicto paso a paso y difiere de la versión más extendida sobre la zona campal de la pugna que la mayoría de los historiadores sitúan en los Llanos de las Américas, próximo a Miranda del Rey, pedanía de Santa Elena. Él, en cambio, la desplaza más al sureste, entre la ladera sur del monte Los Olivares y el declive norte del cortijo Las Viñas en el que estaba situado el palenque del califa Al Nasir, un valle de 300 hectáreas aproximadamente.
En el libro resulta interesante la serie de fotos que reflejan vestigios de la famosa batalla. En este grupo aparecen escudos, puñales, cadenas, sellos, picas, botones, herraduras, abrojos, espuelas, gemelos y cerraduras.
Elogios
El doctor en Geografía e Historia y Consejero de Número del Instituto de Estudios Gienenses, Manuel Gabriel López Páyer, manifiesta en el prólogo del libro que «Nicolás ha pisado una y mil veces cada escena de la Batalla, la ha vivido, ha comprobado cada dato y todo esto nos lleva a una importante conclusión: conoce muy bien el paisaje de la Batalla y si a ello le sumamos sus conocimientos de militar, de estratega, el resultado no puede ser otro que un buen libro, con muchos datos fiables y excelentemente ilustrado».

No hay comentarios:

Publicar un comentario