- El nuevo trazado acortará en nueve minutos el tránsito por la zona
- Puede soportar hasta 57.000 vehículos por día en el horizonte de 2030
- Los nuevos tramos han tenido en cuenta el impacto ambiental
- La calzada descendente entrará en servicio al completo en 2012
Un total de 14,1 kilómetros de los nuevos tramos de la Autovía del Sur A-4 a su paso por Despeñaperros (la nueva calzada sentido Madrid y más de la mitad de la calzada sentido Andalucía) han entrado este lunes en servicio, permitiendo cruzar el accidente geográfico en unos cinco minutos.
El ministro de Fomento, José Blanco, y el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, han asistido a la apertura de las vías, en las que se han invertido 190 millones de euros.
Para Blanco, las actuaciones en el paso han dado lugar a una infraestructura que marca la diferencia y una nueva forma de viajar, en la que se acortan los tiempos y se mejora la seguridad.
Por su parte, Griñán ha apuntado que gracias a las obras la comunidad andaluza está ahora "mucho más cerca de Castilla-La Mancha y del resto de España", ya que el paso de Despeñaperros "era una especie de línea divisoria entre el Norte y el Sur".
El trazado original del paso de Despeñaperros en Sierra Morena data del reinado de Carlos III, aunque fue reformado en 1984 cuando se convirtió en autovía la antigua Nacional IV que unía Madrid con Cádiz.
El nuevo trazado consta de una calzada de tres carriles para cada sentido de circulación, que supuso una de las modificaciones introducidas por Fomento al proyecto original, en el que sólo se contemplaba la construcción de una única calzada de dos carriles en sentido Madrid.
De los 14,1 kilómetros puestos en servicio, 9,4 kilómetros corresponden a la calzada hacia la capital, lo que supondrá una reducción del tiempo de recorrido de al menos nueve minutos en este sentido. En cuanto a la calzada con sentido Andalucía, se pondrá en servicio completamente en 2012.
Está previsto que la infraestructura, que en la actualidad soporta un tráfico medio diario del orden de 24.000 vehículos, con un 30 por ciento de vehículos pesados, pueda llegar a ser transitada por unos 57.000 vehículos en el año 2030.
La obra ha tenido muy en cuenta el medio ambiente, ya que la autovía atraviesa el Parque Natural de Despeñaperros. En ese sentido, se han previsto medidas para reducir y mejorar el impacto ambiental, como el aumento de zonas de paso de fauna, la creación de una vía verde, la limpieza de cauces o la mejora de las condiciones del hábitat del conejo y del lince.
Críticas locales
A pesar de sus bondades, esta puesta en servicio no ha estado exenta de polémica. El alcalde del municipio jiennense de Santa Elena, el popular Juan Caminero, exigió el sábado a Fomento el pago de los 582.000 euros que adeuda al Ayuntamiento por los mutuos acuerdos que en su momento se realizaron en la expropiación de terrenos para intervenciones en la A-4.
"No sé a qué viene inaugurar unas obras que no están acabadas", aseguraba el primer edil, que achacaba al gobierno aprovechar hasta el último minuto el plazo para hacer inauguraciones antes de las elecciones.
Asimismo, pedía al ministro que tuviera en cuenta la situación de los ayuntamientos y pagara lo que debe a Santa Elena, cuya tesorería "se están cargando". El alcalde aprovechó para solicitar que se tenga un detalle con el pueblo, colocando algún monolito recordatorio que haga referencia a este municipio, "que es la puerta de Andalucía".
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