El Ayuntamiento de Santa Elena y el estudio de arquitectos que tratan de 'revivir' el balneario están manteniendo encuentros con distintos grupos empresariales.
El Ayuntamiento de Santa Elena no cesa en su intento de conseguir revivir la Aliseda y convertirla el antiguo balneario en una infraestructura moderna, que atraiga al llamado turismo de salud. Está a la espera de que el Ministerio de Fomento de el visto bueno a una subvención con cargo al 1% Cultural, para cubrir cerca del 60 por ciento de la inversión. Pero mientras, «sabemos que es importante para que nos la concedan, que tengamos a una empresa privada interesada en el proyecto, y dispuesta a invertir el 40 por ciento restante», explica el alcalde de Santa Elena, Juan Caminero (PP), en cuyo término se encuentra el paraje natural de La Aliseda, de cuyas aguas, se creía antaño, que tenían propiedades curativas.
Para ello, tanto el Ayuntamiento, como el estudio de arquitectos de Sevilla que ha diseñado el proyecto del futuro balneario, están manteniendo encuentros con distintos grupos empresariales para darles a conocer la iniciativa. El primero de esos encuentros ha sido con un grupo empresarial madrileño, «aunque muy vinculado a Santa Elena porque tienen aquí una finca y varios negocios», y además conocen el turismo de salud, ya que acaban de invertir en este sector en la provincia de Málaga.
Comentan que también están a la espera de celebrar una reunión con la familia Gil Marín de Madrid, así como un grupo inversor de Jaén.
Caminero también está buscando apoyos entre otras administraciones. «Creemos que la Diputación Provincial podría apoyar el proyecto, porque así nos lo han hecho saber, igual que desde la Junta de Andalucía, de momento, nos han rechazado la ayuda».
«No paramos de trabajar en esto. El balneario sería la salvación del pueblo, y tenemos que sacarlo adelante».
Un siglo de historia
La Aliseda fue un reconocido balneario de aguas medicinales, que por circunstancias de la historia acabó desapareciendo. Ahora, un siglo más tarde, el Ayuntamiento y el estudio de arquitectos, dirigido por alguien muy vinculado a esta tierra, buscan la fórmula de hacerlo revivir. Es un proyecto ambicioso pero no imposible. Ya lo consiguieron entre los años 2001 y 2007 cuando llegaron a contar con una subvención del Ministerio de Fomento, con la cesión de los terrenos por parte de la Consejería de Medio Ambiente al Ayuntamiento de Santa Elena, a través de una permuta, y hasta con unos empresarios «procedentes de Almería» y dispuestos a invertir el dinero restante para levantar de nuevo el balneario, y gestionarlo.
¿Qué pasó? Nadie a ciencia cierta lo sabe, aunque todos señalan al equipo municipal de Gobierno de entonces, que no dio el espaldarazo último a esta infraestructura. Ahora, en torno a una década más tarde, el proyecto de rehabilitación, que ya elaboró en su día el estudio de arquitectura Campos Alcaide, sigue más que vigente. Su gerente, Antonio Campos, natural de Santa Elena, explica que la idea sería construir, en el espacio que ocupa la finca La Aliseda, un hotel con 58 habitaciones, un balneario, y un apartahotel con 28 bungalows.
La inversión necesaria ronda los 12,5 millones de euros y, según los cálculos del proyecto, que contempla además un estudio de viabilidad, supondría la creación de 43 empleos. Por eso desde el Ayuntamiento lo consideran la «salvación» de la localidad.